En primer lugar, para empezar a hablar de quienes ejercen la cirugía nos remitimos a un dicho:
“Aquel que trabaja con las manos es un artesano. Aquel que trabaja con el corazón es un artista. Aquel que trabaja con las manos, el corazón y la mente es un cirujano.”
Sin lugar a dudas, entre las profesiones que, no sólo resistirán el embite de la modernidad, sino que mejorarán con los avances tecnológicos, está la medicina. Pero en particular, la figura del cirujano ganará relevancia dada su complejidad.
Las máquinas inteligentes han venido para quedarse, pero trabajarán con él. El cirujano controla el brazo robótico con una computadora. La percepción espacial y la manipulación milimétrica, lo que se conoce como la precisión de cirujano, les convierte en imprescindible. A quien decida encauzar su futuro por estos derroteros, le auguramos un fantástico porvenir.
Artículo recomendado:
